Sábado 4 de febrero de 2012, el grupo
de amigos conocido como BTT PATERNA, se decide a realizar una de sus
“habituales” salidas, pero con alguna peculiaridad, ha aumentado
la distancia de la misma (esperan que salgan unos 120 km) y las
inclemencias del tiempo, no solo la ola de frío de Siberia que azota
a todo el país, sino también las rachas de viento que para ir en
bici es lo peor. Son las 8:00 h de la mañana, nos juntamos un grupo
de 17 ciclistas, o en este caso no se sabe bien si eramos esquimales
de lo abrigados que íbamos, más puntuales de lo habitual
comenzamos a pedalear, el grupo sale desde Paterna con un buen ritmo,
Candeu un componente del grupo dice que es para entrar en calor, pero
lo que no sabe es que cuanto más rápido vamos más aire nos da
jejeje, pasamos por la zona del Terret hasta llegar a la Albereda de
San Antonio, para desde ahí acceder a la Cañada, el grupo va
rápido, vamos por una bajada algo pedregosa y de repente el que
escribe sale volando, me levanto de un salto y todo el grupo estaba
alrededor preguntando ¿estas bien, estas bien?, no hay prisa,
mirate que no tengas nada, y ademas de los rasguños de rigor lo
único que tenia tocado era el orgullo de caer en uno de los pasos
más llanos de la zona. En menos de un minuto proseguimos la marcha,
y nos adentramos en el parque fluvial dirección Ribarroja, y es en
ese momento cuando realmente se comienza a notar tanto el frío como
el aire, como era de esperar ni un alma por la zona, con lo que
podemos rodar agrupados y no tan estirados como tocaría hacer
cualquier otro sábado, pasamos Ribarroja, llegamos al final del
parque fluvial y nos disponemos a salir de el, dirección a la rambla
castellana, cuando nos damos cuenta que nos falta un componente del
grupo, el señor Javieritis. Paramos y le esperamos en el cruce,
extrañados de que se haya descolgado del grupo le llamamos y nos
comenta que le queda poco para llegar a la zona donde le esperamos,
al llegar comenta que le duelen las piernas que las tiene cargadas,
(se nota que necesita unas semanas de descanso) pero como tiene mas
“bemoles” que los toros, dice que continua con el grupo, y eso
que le esperan más de 70 km. Cogemos un poco de asfalto dirección la castellana.
Nos adentramos en la castellana,
comenzamos a ver los primeros charcos helados, pero se nota que solo
es una fina capa de hielo, y entre el viento y el cansancio el grupo
se divide en dos, reagrupándose en cada cruce para no perder a
ningún componente, dejamos la castellana y nos metemos por caminos
de huerta, hacemos un par de “repechitos” son sus respectivas
“bajaditas” y en una de esa salimos a unas roderas que intentamos
pasar, pero incluso la capa de barro estaba helada y la bici resbala,
Candeu, que era el primero que intento cruzar, consigue sacar el pie
de la cala, y evitar una caída, pasamos por el lado andando, y vemos
que hay una capa de hielo de más de un centímetro de gorda,
rompemos un poco y nos hacemos una foto con ella, aprovechamos la
zona para esperar a algún ciclista que se había quedado retrasado.
Pocos minutos después llegan y sin
darles ni un segundo de respiro a los pobres se escucha “no paréis,
no paréis” y seguimos la marcha ya estamos “cerca”, tras unos
minutos más sufriendo con el viento llegamos por fin al cruce con la
carretera del desvio a Villar del Arzobispo, según el cartel nos
quedan 4km, y según nos habían dicho hacia más de media hora solo
estábamos a 5km, así que algo no cuadraba jejeje.
Cruzamos el puente dirección nuestro
objetivo, y con el aire que hace más de uno esta apunto de salir de
la carretera, así que cogemos un camino paralelo a la mismo para
evitar el peligro, que además nos ahorrará 1km y tal y como íbamos
eso era mucho ahorro, entremos en el camino y ya se divisa el pueblo,
seguimos pedaleando pero parece que el pueblo se aleja, como si no
quisiera que nosotros llegásemos, en eso que un golpe de aire casi
me tira a un campo y pienso a tomar por saco, a andar un poco que
estoy hasta los “mismos” de pedalear y no quiero que el viento me
tire, cuando llevo 3 minutos tan tranquilo caminando, tirando de la
bici, se oyen unos gritos que llegan desde atrás, me imagino quien
es pero me giro para comprobarlo, en efecto es Quique Macián (gps
macián para los amigos), - ¿Qué haces andando? Sube a la bici coño
(perdón por la expresión pero es lo que dijo). Quique es una
persona a la que no le puedes decir que no, porque sino es peor, así
que me subo a al bici y junto con Quique e Isbru, llegamos al pueblo.
Aparecemos en un cruce, no sabemos hacia donde es, hacemos una
llamada y “ale” al bar, pero antes de llegar al compañero Boti
que llegó al cruce mientras realizábamos las llamada y a Quique,
les toca torear con un contenedor que estaba en la carretera y que
iba a por ellos. Por fin llegamos al bar, son la 13:00, ahora toca almorzar y
disfrutar un poco antes de hacer el camino de vuelta.
Tras el almuerzo, las risas y rellenar
los depósitos con nuestro “carburante” a base de hierbas
retomamos la marcha para volver a casa, hay alguna baja, debido a
diversos problemas, cansancio, estomacales... pero 13 bikers siguen
de vuelta a casa, nos subimos a las bicis pensando que la vuelta ira
mejor, porque ademas de ir hacia abajo (o eso nos dicta la lógica)
el viento debe ayudarnos porque al venir lo teníamos en contra,
pero viendo la inclinación del brazo de nuestro guía ya empezamos a
pensar que no todo va a ser hacia abajo,
y en efecto nada más salir,
“repechito” al canto, el bocata ya ha viajado hasta los tobillo,
subimos por una zona pedregosa, coronamos esa zona y ahora sí,
empezamos a bajar; unos más rápido, otros más despacio para
disfruta del poco rato de descanso que hemos tenido... Y por fin
llegamos al canal que nos llevará hasta Bétera, por dentro del
canal sopla un viento increíble, y el maestro Candeu nos realiza una
clase teórica de lo que es rodar en abanico, lo ponemos en práctica
y se comienza a escuchar; “puf como se nota”, “así se rueda
mejor” y pedaleada a pedaleada llegamos hasta Bétera, no sin antes
realizar un par de paradas, una porque a nuestro amigo Román le
llaman desde casa para decirle que las tuberías han reventado a
causa del frío, y la otra para que Nino llame a su mujer a
preguntarle y se puede acercar a recoger a Javi que el pobre ya no
puede más, si Javi es ese que hace más de 70 Km nos decía que no
le iban las piernas (ahora entendéis porque digo que tiene unos
buenos “bemoles” jejeje)
Tras dejar a Javi en el coche escoba,
el resto seguimos hasta Paterna, por el camino y con la ganas de
llegar a casa, un componente se equivoca de camino y se desvía, al
reagruparnos vemos que nos falta y nos ponemos en contacto, nos
comenta que se ha pasado el cruce y que se marcha ya para casa, el
grupo cada vez se hace más pequeño, ya solo nos quedan 10 minutos
hasta casa, el viento no para aunque si es cierto que en esta zona
sopla más suave, las piernas ya van solas, y por fin llegamos a
nuestro punto de salida, que a su vez es el punto final. Son las
17:15, nos despedimos y hasta la próxima.
Aquí podéis ver el track de la ruta realizada:
Actividad: mountain bike
cerca de Paterna, Valencia (España)
Distancia recorrida: 116,68 kilómetrosAltitud min: 49 metros, max: 573 metros
Desnivel acum. subiendo: 940 metros, bajando: 994 metros
Grado de dificultad: Moderado
Fecha: febrero 07, 2012
Finaliza en el punto de partida (circular): No
Coordenadas: 187
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